La psicología del color
La psicología del color es un campo de estudio fascinante que se centra en cómo los colores afectan nuestro comportamiento, emociones y pensamientos.
Si bien los efectos de los colores pueden variar en función de la cultura y del individuo, el uso estratégico de los colores puede ser una herramienta poderosa para comunicar emociones y crear impresiones duraderas.
Qué transmiten los colores
La primera pregunta que debes hacerte al elegir un color es ¿Qué quiero transmitir? A continuación detallamos algunos de los significados más comunes:
Rojo: Se asocia a la energía, la pasión, la fuerza y el peligro. También puede evocar amor y emoción.
Naranja: Representa la energía, creatividad, entusiasmo y aventura. Hace sentir felicidad y confianza.
Amarillo: Es la felicidad, la vitalidad, la juventud y la diversión. Se trata de un color optimista y cálido.
Verde: Asociado con la naturaleza, la tranquilidad, la armonía y la estabilidad. Nos da sensación de seguridad y crecimiento.
Azul: Es la representación de la calma, la confianza y la lealtad. Nos obstante, según su tono puede evocar sentimientos de tristeza y melancolía.
Púrpura: Representa la creatividad, la inteligencia, la imaginación y la madurez. También puede inducirnos a pensar en misterio y magia.
Rosa: Se asocia con el amor, la dulzura, la inocencia y la ternura.
Marrón: Es el color que representa la tierra, la estabilidad y la comodidad.
Gris: Es un color neutro. Asociado a la sofisticación y la elegancia.
La combinación de colores
Ya tienes claros tus colores pero ahora queda lo más importante, cómo combinarlos. Aquí te damos unas pautas:
Colores análogos
Los colores análogos son una buena opción para crear una sensación de continuidad y cohesión. No obstante, es importante usarlos adecuadamente para evitar que el diseño se vuelva monótono o aburrido.
Complementarios
El uso de colores complementarios crean un un fuerte impacto visual. Pero, es importante tener en cuenta que el uso excesivo de colores complementarios puede ser abrumador y cansado para los ojos.
Triada de colores
El uso de una triada de colores puede crear un diseño vibrante y equilibrado porque son colores propios que se complementan entre sí. Hay que prestar atención a la saturación, brillo y tonalidad para así lograr un equilibrio visual adecuado.